Los tipos de ortodoncia atienden diferentes anomalías que perjudican la posición de los dientes. Cada situación amerita de un tratamiento especializado, por esa razón, la ortodoncia va mucho más allá de los aparatos.

La ortodoncia se orienta a tres acciones principales: la prevención, la intercepción y, por último, la corrección. Cada uno de los tipos de ortodoncia se va a relacionar con el grado de avance que tenga el problema que se desea atender.

 

Tipos de ortodoncia

 

Preventiva

Se utiliza para prevenir la aparición de los problemas, es decir, que depende en gran medida de la intuición y la experiencia del odontólogo. En estas circunstancias, el problema no ha aparecido todavía en los dientes, pero por las condiciones de la boca del paciente terminaran por presentarse.

Debido a su condición, este es de los tipos de ortodoncia que únicamente puede ser usada en niños. En pocos casos, se puede emplear en adolescentes que no han culminado el cambio de los dientes de leche.

En los niños no se completado la maduración de los dientes y con la ortodoncia preventiva es posible supervisar y guiar el crecimiento, en correcta posición, de toda la dentadura. Los pequeños pueden comenzar a tener complicaciones de espacio entre dientes o dientes supernumerarios.

Entonces, con la prevención el ortodoncista puede evitar que esos problemas comprometan en un futuro la sonrisa y la salud bucal. Quizás, se recomiende el uso de aparatos removibles o el especialista puede decidirse por otra técnica para ayudar al paciente.

 

Interceptiva

La intercepción se aplica como una forma de mediación de un defecto en la disposición de los dientes. Sin embargo, ese defecto no se ha agravado o no ha pasado mucho tiempo de haberse presentado en la boca. De los tres tipos de ortodoncia, la intercepción se encuentra en el tránsito de la prevención a la corrección.

Asimismo, puede dar soluciones muy efectivas y en tiempos más cortos a problemas de mordida o dientes desalineados. Los tratamientos son menos invasivos, generalmente con aparatos removibles. Además, su efecto beneficioso puede ayudar a moldear y controlar el crecimiento de los dientes y la mandíbula. Por lo tanto, sirve para solventar de forma temprana inconvenientes que pueden derivar en trastornos de la columna y cuello. También, en desgaste prematuro de piezas dentales y distorsiones de la mandíbula.

 

 

La intercepción solo es funcional en niños y adolescentes, pues en adultos los problemas suelen estar más arraigados. Por lo que necesitan de una corrección más profunda.

 

Correctiva

Esta es la última opción de los tipos de ortodoncia. La corrección se aplica cuando el problema lleva presente en la boca por un período de tiempo considerable. Debido a esa característica, su uso es mucho más frecuente en adultos. Las anomalías a corregir son más complejas por su antigüedad. Sin embargo, no son situaciones insalvables, simplemente van a requerir más tiempo de tratamiento y, obviamente, más procedimientos.

 

 

Razón por la cual, se necesitarán los aparatos fijos y removibles por el tiempo que indique el ortodoncista. En algunas ocasiones, poco frecuentes, se recomendará practicar alguna cirugía. Aunque, esto es únicamente en los casos de problemas severos que los aparatos, por sí solos, no puedan solventar. Esta será la última opción, pues el ortodoncista dará prioridad a los procedimientos alternativos con aparatos.

 

Como ves los tipos de ortodoncia son variados y sirven para atender todos los requerimientos. Para pequeños y grandes la ortodoncia ofrece soluciones.

 

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